“Lo único constante en la vida, es el cambio”, frase que describe muy bien este nuevo mundo en el que vivimos, marcado por la incertidumbre y la globalidad. Y es así como, en este entorno tumultuoso, emerge un nuevo paradigma de liderazgo, uno que requiere habilidades y competencias fundamentales para navegar a través de la transformación constante. Este nuevo modelo de liderazgo demanda de nosotros una profunda introspección y desarrollo personal.
Aquí describo algunas características esenciales de este nuevo liderazgo:
Autoliderazgo: El fundamento del liderazgo efectivo radica en la habilidad de gobernarse a sí mismo. Como subraya Daniel Goleman, pionero de la inteligencia emocional, esta competencia personal engloba la autoconciencia, autogestión, empatía y habilidades sociales. De hecho, TalentSmart, líder en formación de inteligencia emocional, indica que esta inteligencia emocional representa casi el 58% del rendimiento en todos los trabajos. Y un informe de McKinsey resalta que el 85% de los ejecutivos creen que la transformación personal es esencial para el liderazgo efectivo.
Maestría en Comunicación: Un líder de alto impacto es un comunicador excepcional. Debe tener la capacidad de transmitir ideas de forma clara y persuasiva, inspirar y motivar a los demás, y manejar conversaciones difíciles con tacto y respeto. Un estudio de la Universidad de Cambridge señala que los líderes que dominan la comunicación persuasiva pueden impulsar la productividad de su equipo en un 20%.
Fomento de la Agilidad Organizacional: La agilidad es un pilar en las organizaciones actuales. Los líderes necesitan cultivar culturas laborales que promuevan la adaptabilidad, la colaboración y el aprendizaje rápido. Bain & Company informa que las organizaciones ágiles pueden mejorar su eficiencia operativa en un 30%.
Visión Clara y Dirección Estratégica: Un líder visionario puede anticipar el futuro y transmitir esta visión a su equipo de manera convincente. Este líder, con una visión y dirección estratégica claras, puede alinear todas las acciones y decisiones para el logro de los objetivos deseados. McKinsey & Company sugiere que las organizaciones lideradas por visionarios estratégicos tienen un 30% más de probabilidades de destacarse en su industria.
Creación de Equipos de Alto Rendimiento: Los líderes eficaces deben saber cómo formar y nutrir equipos de alto rendimiento. Estos equipos, conocidos por su compromiso, innovación y eficiencia, impulsan la productividad y la competitividad. Según el Proyecto Aristóteles de Google, los equipos de alto rendimiento superan a sus homólogos en un 35-50%.
Innovación y Mejora Continua: Para dirigir las organizaciones del futuro, los líderes deben fomentar una cultura de innovación y mejora continua. El informe Global Innovation Index 2021 afirma que las empresas que promueven la innovación son dos veces más propensas a crecer de manera sostenible que aquellas que no lo hacen.
Estos atributos que describo, no son mera teorías o meras tácticas de gestión, se trata de una transformación más profunda que debemos aprender a desarrollar si queremos construir equipos y organizaciones líderes.
Claudia A. Claver R.
Asesora Estratégica – SOMBRERO AZUL SRL