La inteligencia artificial (IA) es una de las tecnologías más fascinantes y revolucionarias de nuestro tiempo, desde diciembre del 2022, esta tecnología se abrió al mundo y desde ahí no ha dejado de sorprendernos con los usos que se le puede dar.
Pero a medida que las IA avanzan, también aumenta el miedo de muchas personas de ser reemplazadas por esta nueva tecnología, puesto que presentan muchas oportunidades para las empresas que buscan aprovechar su poder.
Las IA pueden mejorar la eficiencia de los procesos, automatizar tareas repetitivas, mejorar la precisión y la toma de decisiones, e incluso generar nuevas oportunidades de negocio en las empresas, también nos ayudan a analizar grandes cantidades de datos y obtener información valiosa sobre sus clientes y mercado, lo que nos ayuda a tomar decisiones más informadas y rápidas.
Sin embargo, la alta automatización que realizan las IA, puede conllevar también a que algunas tareas y trabajos sean reemplazados por máquinas, y esto significaría que las empresas disminuirían las ofertas de empleo en algunos sectores, lo que afectaría a las personas y a su economía.
Para mitigar estos riesgos, es importante que las personas y empresas tomen medidas proactivas al invertir en la formación y el desarrollo de habilidades de sus trabajadores, de manera que puedan adaptarse a los cambios que se vienen con las nuevas tecnologías.
Por ejemplo, las carreras de programación, el análisis de datos, la gestión de proyectos y la ciberseguridad, apoyadas en IA son campos nuevos a explorar. Desarrollar habilidades que son difíciles de automatizar como la creatividad, el pensamiento crítico y la resolución de problemas o habilidades blandas como la comunicación efectiva, la colaboración y el liderazgo, que les permitan trabajar de manera efectiva en equipos interdisciplinarios.
De acuerdo a varios expertos las IA no son un reemplazo total de los trabajadores humanos, en cambio, están diseñadas para trabajar en conjunto con los humanos, y las empresas pueden obtener mejores resultados cuando combinan la IA con la inteligencia y la experiencia de los trabajadores.
Si bien algunos trabajos pueden ser automatizados y reemplazados por las IA, también creo que el mundo está en constante evolución y las tecnologías emergentes pueden crear nuevas oportunidades y cambiar la demanda laboral en cualquier momento.
